José Luis Martí. El pulmón sevillista

José Luis Martí Soler fue centrocampista del Sevilla FC durante cinco temporadas. El mallorquín resultó ser una pieza fundamental en el esquema del mejor Sevilla de los títulos. Llegó a Nervión en 2003 y se marchó en 2008, tras haber ganado cinco títulos con el conjunto sevillista. Toda una Leyenda del Sevillismo.

Sus inicios

José Luis Martí nació en Palma de Mallorca el 28 de abril de 1975. Se formó en las categorías inferiores del Mallorca y en la temporada 1995/1996 ya formaba parte de la plantilla del Mallorca B, que militaba entonces en la segunda división B.

Martí, tenía por aquel entonces veinte años y compartía vestuario en el filial mallorquinista con su hermano mayor, Toni Martí, quien no correría la misma suerte en el mundo del fútbol y no pudo triunfar en la élite, aunque desarrolló una digna trayectoria en distintos equipos de segunda B y tercera división.

Su etapa en el Mallorca B y su salto al primer equipo

Tras dos campañas en las que Martí fue titular indiscutible en el filial bermellón, el centrocampista llegó a ser convocado con el primer equipo en la temporada 1996/1997. El Mallorca se encontraba en segunda división y en sus filas militaban los exsevillistas Carlitos (cedido por el Sevilla), Monchu y Santaella, además de dos futbolistas que acabarían militando en el Sevilla, Luis Gil y el gran David Castedo. 

En su tercera campaña en el Mallorca B (1997/1998), el equipo consiguió el ascenso a segunda división y Martí fue una de las piezas claves para conseguir la proeza. Por tanto, el centrocampista balear iba a cumplir su cuarta temporada en el Mallorca B jugando por primera vez en la segunda división.
En ese equipo militaban unos jovencísimos Leo Franco, Diego Tristán y Albert Luque, que como Martí, tendrían en el futuro una amplia trayectoria en primera división. Finalmente, el equipo no logró mantener la categoría en aquella temporada 1998/1999 y descendió de nuevo a segunda B. Martí participó en 25 encuentros durante aquella campaña en segunda con el filial mallorquinista.

A sus 24 años, Martí ascendió al primer equipo en la temporada 1999/2000, aunque apenas disfrutaría de oportunidades en la máxima categoría, por lo que decidió poner fin a su etapa como mallorquinista al término de la campaña y se marchó libre al Tenerife.

Su etapa en Tenerife

En su primera campaña fuera de Palma de Mallorca, Martí, se convirtió en una pieza fundamental en el esquema de Rafa Benítez, que entrenaba al Tenerife durante aquella campaña 2000/2001. El centrocampista balear disputó 39 encuentros de liga y consiguió anotar 4 tantos. Finalmente, El Tenerife logró el ascenso, junto al Sevilla, que se proclamó campeón de la categoría, y el Betis.

En el regreso a primera división del Tenerife, Martí fue titular indiscutible, aunque el equipo acabó descendiendo. Ni Pepe Mel ni posteriormente, Javier Clemente, pudieron lograr mantener en la máxima categoría al Tenerife durante aquella temporada 2001/2002.

Martí, plenamente adaptado al equipo y a la ciudad, decidió continuar con el equipo en segunda división. Continuó siendo un fijo en las alineaciones, aunque el equipo no consiguió el objetivo marcado a principios de la campaña, que no era otro que el de regresar a primera. El contrato que unía al centrocampista mallorquín con el Tenerife expiraba al término de esta campaña, la 2002/2003.

Su etapa más fructífera, en el Sevilla FC

fuente:www.bdfutbol.com

La dirección deportiva sevillista se fijó en Martí para reforzar el centro del campo sevillista. El centrocampista decidió aceptar la oferta del Sevilla, a pesar del interés que había mostrado el Valencia.

Martí, a sus 28 años, tenía una nueva oportunidad para asentarse en primera división, de la mano del Sevilla de Joaquín Caparrós. Durante su primera campaña como sevillista, la 2003/2004, el futbolista mallorquín se convirtió en un fijo de las alineaciones del técnico utrerano. Pep Martí disputó 36 partidos como titular y marcó un único gol, de bellísima factura, curiosamente, al Mallorca, el equipo de su alma, el mismo que no le había brindado oportunidades en primera división.

El Sevilla realizó una excelente temporada, clasificándose para jugar la Copa de la UEFA, tras años de ausencia en competiciones europeas, y siendo eliminado en semifinales de la Copa del Rey, frente al Real Madrid. 

Aquí podéis ver el golazo de Martí:

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Martí afrontaba su segunda campaña como sevillista en la temporada 2004/2005. El centrocampista balear confirmó lo mostrado en su primera campaña y las cualidades que lo llevaron a firmar por el Sevilla. 

El mallorquín era un futbolista de una condición física extraordinaria, que se sacrificaba en beneficio del equipo y que era considerado como una extensión del entrenador en el terreno de juego, por sus dotes de mando y su rigor táctico. Además, Martí no estaba exento de calidad. Era un centrocampista todoterreno que abarcaba mucho espacio y que recuperaba numerosos balones por partidos. Martí jugó en su segunda campaña 32 encuentros de liga y 9 de UEFA. Finalmente, el equipo sevillista quedó a las puertas de clasificarse para la Champions League.

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En la temporada 2005/2006, la plantilla sufrió una gran renovación, empezando por el banquillo. Juande Ramos sucedió a Joaquín Caparrós. Martí realizaría una campaña espectacular, gozando en todo momento de la confianza del nuevo técnico.

Jugó 33 partidos de liga y marcó un gol. Fue una pieza clave en la Copa de la Uefa lograda por el conjunto sevillista, demostrando, con sus despliegues físicos por toda Europa, que el Sevilla tenía un verdadero pulmón en el centro del campo.

Jugó 12 partidos en aquella competición europea, incluída la final ante el Middlesbrough. Martí era fundamental en el juego sevillista, un pilar básico para el equipo, aportaba equilibrio al sistema empleado por Juande Ramos y era el encargado de cubrir las espaldas de Daniel Alves cuando éste se incorporaba al ataque. El último tramo de las dos competiciones del Sevilla fue brutal, aunque finalmente, no consiguió clasificarse para la disputa de la Champions League, debido al gol-average.

Martí, celebra con alegría el tanto de Luis Fabiano, que abrió la lata en la final de Eindhoven

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Martí, con 31 años, cumplía su cuarta temporada como sevillista en la campaña 2006/2007. El balear continuó entrando en los planes de Juande Ramos, aunque la llegada de Poulsen y las rotaciones le privaron de jugarlo todo, como en anteriores campañas.

La temporada comenzó de forma exitosa, pues el conjunto sevillista se alzó con la Supercopa de Europa tras vencer brillantemente al Barcelona, donde Martí disputó 44 minutos en aquella final.

El Sevilla acabaría firmando una de las campañas más exitosas de toda su historia, consiguiendo su segunda Copa de la Uefa consecutiva, la Copa del Rey y además, peleando el título de Liga hasta la última jornada. Martí participó en 30 encuentros de liga, 9 de Copa y 12 de UEFA, en los que marcó tres goles. Fue titular en la final de la Copa de la Uefa frente al Espanyol, disputando los 120 minutos del encuentro y en la final de la Copa del Rey, salió como suplente y disputó los últimos diez minutos del encuentro.

La temporada 2007/2008 sería la última de José Luis Martí en el Sevilla. El centrocampista comenzó jugando habitualmente, formó parte del once inicial en ambos partidos de la Supercopa de España que logró el Sevilla frente al Real Madrid, además de debutar en la Champions League.

Sin embargo, tras el mazazo que supuso el trágico desenlace de Antonio Puerta y la marcha posterior de Juande Ramos tras la disputa de la séptima jornada de Liga, el nuevo técnico, Manolo Jiménez, empezó a contar cada vez menos con el mallorquín. Martí solo disputó nueve encuentros de Liga, dos de Copa y cinco de Champions durante la primera vuelta del campeonato.

Ante la falta de minutos, Martí se marchó cedido a la Real Sociedad en el mercado de invierno, volviendo a jugar así en segunda división. Allí se hizo titular indiscutible y cuajó una estupenda segunda vuelta.

A su regreso a Sevilla, Martí, que había cumplido 33 años, no tenía sitio en los planes de Manolo Jiménez. El futbolista, se encontraba en plena forma física y quería continuar jugando con asiduidad. El Mallorca se interesó seriamente por él, pero el Sevilla no guardaba buenas relaciones con el club bermellón tras las trabas que puso al club sevillista en el fichaje de Fernando Navarro y por la forma en que trató el asunto de Javi Navarro y Arango.  

Martí tuvo que pedir al presidente, José Mª Del Nido, y a Monchi, que le facilitaran su salida. Finalmente, el Sevilla cedió, en agradecimiento al jugador, y traspasó a Martí al Mallorca por medio millón de euros. Una decisión, que a la postre resultó errónea, ya que el centrocampista jugó a un gran nivel posteriormente y el Sevilla tuvo que contratar numerosos jugadores en su posición con escaso acierto.

Martí se marchaba del Sevilla tras conseguir cinco títulos, habiendo disputado 206 encuentros oficiales como sevillista, en los que anotó 6 goles. El mallorquín se despidió del club nervionense y el sevillismo con una emotiva carta que finalizaba así: "Solo me queda deciros que José Luis Martí es sevillista y será sevillista por encima de todo y que algún día volveré para estar al lado de todos vosotros, donde tan a gusto me encontrado. Por eso no os digo adiós, sino hasta pronto. Muchas gracias por todo, os quiero y siempre os llevaré en mi corazón".

Una segunda juventud

Cuando parecía que Martí volvería a Mallorca para volver a su tierra y disputar alguna temporada más en el ocaso de su carrera, el centrocampista mallorquín, lejos de vivir una jubilación dorada, se convierte en titular indiscutible durante varias temporadas, rindiendo a un gran nivel, ejerciendo de capitán y erigiéndose en el hombre clave del Mallorca.

Disputó cinco temporadas con el equipo balear en primera división, participando en 160 encuentros y consiguiendo anotar 4 goles. Tras el descenso, continuó en el Mallorca dos temporadas más, militando de nuevo en segunda división. Finalmente, se retiró al finalizar la campaña 2014/2015, cuando tenía 40 años.

336 encuentros en primera división, 156 partidos en segunda división, 33 partidos de Copa de la UEFA, 59 de Copa del Rey, 5 en Champions League y 11 goles son los registros de un futbolista histórico para Tenerife, Mallorca y Sevilla.

Al finalizar este artículo nos encontramos con la noticia de que Pep Martí se convertía en el nuevo entrenador del CD Tenerife, teniendo así su primera experiencia en los banquillos. Su experiencia y sabiduría que exhibió en el terreno de juego, a buen seguro que le vendrá genial al Tenerife para mantener la categoría y a pensar, por que no, en cotas más altas.

Martí ya es un nuevo candidato para entrenar al Sevilla en un futuro, pues proviene de esa estupenda generación de futbolistas que tanto ofreció al Sevilla, que sus aficionados recuerdan con cariño, y que ahora empiezan a labrarse un nombre como entrenador, al igual que Pablo Alfaro, Andrés Palop o Kanouté.