Manuel Jiménez Jiménez fue lateral izquierdo internacional del Sevilla durante catorce temporadas, con el "3" a la espalda. Un futbolista que hizo gala de "la casta y el coraje", lema que rezaba en el himno oficial del club sevillista. A continuación repasaremos sus incios, su carrera deportiva y anécdotas varias de esta Leyenda del Sevillismo.
Manuel Jiménez Jiménez nació el 26 de enero de 1964 en la localidad sevillana de Arahal, en el seno de una humilde familia muy trabajadora. Sus primeros partidos con balones de reglamento y porterías de verdad los jugó con el equipo del colegio San Roque, en Arahal.
Jiménez, en el colegio San Roque |
Manolo Jiménez, a la derecha de su padre. |
Desde pequeño soñaba con ser futbolista y aunque era buen estudiante, su vida giraba en torno al fútbol. Su carrera deportiva comenzó en el Arahal CF, jugando en las categorías de infantiles y juveniles, siendo juvenil debutó con el equipo amateur. A los dieciséis años jugaba con los amateurs, por la mañana, y por la tarde con los juveniles, gracias a su excelente condición física. Lo hacía de delantero o extremo, con el "10" a la espalda, aunque la marcha de un jugador del Arahal a la mili hizo que se adaptara a la posición de lateral izquierdo.
Una carrera que pudo ser bien distinta
Jiménez, abajo, el segundo por la derecha, en los juveniles del Arahal |
El propio Jiménez, cuenta como se dirigía a Sevilla, acompañado de su padre, muy bético, y del presidente del Arahal para fichar por el Betis. Como tenían tiempo de sobra, se pararon en Alcalá de Guadaíra, para ver un partido que jugaba un equipo de categorías inferiores del Sevilla.
Al ser vistos por Pepe Alfaro, técnico que ocupó numeros cargos en la cantera sevillista durante muchos años y ya fallecido, le contaron para que iban a Sevilla. Alfaro, habló con su padre y le dijo que el Sevilla le pagaría la pensión y los estudios. A su padre le convenció el buen trato fuera del campo y acabó estrechando la mano al técnico sevillista. Y así fue como cambió su destino.
Su fichaje por el Sevilla
El Sevilla, como compensación por el fichaje de Jiménez, compró unos focos para el campo del Arahal CF, además de acordar un partido amistoso del Sevilla Atlético en Arahal.
Poco tiempo después de llegar a los juveniles del Sevilla, con 17 años, Jiménez abandonó los estudios y puso todo su empeño en dedicarse en cuerpo y alma al fútbol. Tras militar tan sólo un año en juveniles, asciende al Sevilla Atlético la temporada siguiente, esa misma temporada, con 18 años, debutó en el primer equipo de la mano de Manolo Cardo, en octubre de 1983. Fue titular en un Valladolid 3-3 Sevilla.
Su carrera como jugador
Manolo Jiménez fue un lateral incansable, con una buena punta de velocidad y de largo recorrido, aseado en la marca y de regular rendimiento. Luchador, demostró gran pundonor y fue un jugador sumamente limpio. De hecho, en sus quince años como profesional, jamás lesionó gravemente a ningún jugador. La afición sevillista valoró mucho el esfuerzo del futbolista de Arahal, haciendo célebre el cántico de "Jimenéz, Jiménez, que cojones tienes".
Tras debutar en Valladolid, se
estableció definitivamente en la primera plantilla a la siguiente temporada, la
1984/1985, con Manolo Cardo en el banquillo sevillista, aunque contaba con la
competencia en su puesto del gran Curro Sanjosé. En la siguiente campaña, la 1985/1986,
Jiménez se asienta en primera división, disputando 30 partidos como titular.
Además, ese mismo año debutó con la selección sub 21, en un España 3-0
Marruecos. Esa temporada, formó una de las defensas más compactas de la
historia sevillista, junto a Nimo, Antonio Álvarez y Serna.
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En la 1986/1987, la liga cambió su sistema, estableciendo un sistema de play-off. El lateral izquierdo sevillista participó en nada más y nada menos que 43 encuentros de liga, a las órdenes del escocés Jock Wallace.
Jiménez también contó con la confianza de Xavier Azkargorta durante la temporada 1987/1988, participando en 36 encuentros como titular y marcando su único gol en primera división, en un Sevilla 4-0 Las Palmas.
La campaña 1988/1989 fue la de la consagración definitiva de Jiménez, haciéndose un hueco en el panorama internacional tras su debut con la selección española, a sus 24 años y de la mano de Luis Suárez. Esa misma temporada participó con el Sevilla en 36 encuentros, gozando de la confianza de los distintos técnicos que pasaron por el Sevilla esa campaña, Azkargorta, Ortega y Roque Olsen. Además se convirtió en un fijo en las convocatorias de la selección española.
Jiménez en uno de sus particulares duelos con Futre |
Jiménez en una pugna con el argentino Caniggia el día de su debut |
En la temporada 1989/1990, Jiménez participó en 37 partidos como titular, con el argentino Vicente Cantatore en el banquillo sevillista y formando una gran defensa junto a Nando, Salguero y Diego.
Tras finalizar una
excelente campaña en lo personal y en lo colectivo, en la que el Sevilla se clasificó para disputar la
Copa de la Uefa, gracias, en buena medida, a los 33 goles de Anton Polster, el lateral izquierdo sevillista fue convocado para disputar el Mundial de Italia´90
junto a su compañero Rafa Paz. Incluso cuentan, que antes de disputar el Mundial, Jiménez, desechó una oferta del Real Madrid. Antepuso su felicidad y el amor a sus colores al aspecto económico...
Mundial Italia´90
El lateral izquierdo jugó como titular en el partido inaugural de España en el Mundial, frente a Uruguay. También tuvo minutos saliendo desde el banquillo en la eliminatoria de octavos de final frente a Yugoslavia. en la que España, finalmente, cayó eliminada.Jiménez, arriba, el primero por la derecha. |
Tras la disputa del mundial, seis meses más tarde, Vicente Miera sustituyó a Luis Suárez y un año más tarde llegó Javier Clemente en su lugar. El defensa de Arahal no volvió a ser convocado por la selección española, tras haber disputado quince partidos como internacional absoluto.
Para la siguiente campaña, 1990/1991, Jiménez siguió contando con la confianza de Vicente Cantatore, disputando 23 partidos de liga y debutando en competición europea, jugando en cuatro partidos de la Copa de la Uefa.
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En la temporada 1991/1992, Jiménez disputó 33 partidos de liga bajo las órdenes del uruguayo Víctor Espárrago en una campaña muy irregular, en la que el equipo sevillista quedó en el duodécimo lugar, muy lejos de los puestos europeos a los que optaba.
La campaña 1992/1993 era su décima temporada como sevillista a sus 28 años. Un ambicioso Luis Cuervas ejercía por entonces de presidente, apostó por realizar un fuerte esfuerzo económico para fichar a Maradona y al técnico argentino Bilardo, con la intención de situar al club sevillista en la zona alta de la clasificación. A pesar de contar con una gran plantilla, compuesta entre otros por Maradona, Simeone, Suker o Unzué, el Sevilla acaba en el séptimo lugar y no logra entrar en los puestos europeos. Jiménez disputó 25 partidos como titular durante aquella temporada.
Tras finalizar la temporada se marcharon tanto Maradona como el técnico Bilardo. Cuervas decidió contratar entonces a Luis Aragonés, para que se hiciera cargo del Sevilla en la temporada 1993/1994. El técnico madrileño influyó en los fichajes de futbolistas de su confianza como eran Gabi Moya, Soler y Ferreira. A pesar de los 24 tantos de Suker, el equipo se quedó a las puertas de clasificarse para jugar en Europa, tras salir derrotados en el Camp Nou, durante la última jornada del campeonato. Al principio de la temporada, Jiménez no encajó muy bien en los planes tácticos de Aragonés, que sumado a una serie de lesiones musculares que le llevaron incluso a pasar por el quirófano supusieron que el bravo lateral sevillista permaneciera una temporada casi en blanco, participando tan sólo en dos encuentros.
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Jiménez, levantó en pretemporada, el último Trofeo Ciudad de Sevilla celebrado, que ganó el Sevilla imponiéndose por 1-2 al Betis en la final disputada en Heliópolis. |
Luis Aragonés renovó con el Sevilla para dirigir al equipo, de nuevo, durante la campaña 1994/1995.
Jiménez, recuperado, ocupó un papel protagonista como capitán sevillista, disputando 27 partidos como titular en la vuelta del Sevilla a Europa tras cinco años de sequía, finalizando el conjunto sevillista en un meritorio quinto puesto.
En verano de 1995, el capitán sevillista, a sus 31 años, sufrió un duro varapalo con el descenso administrativo del club por no presentar unos avales a tiempo, que condenaban al Sevilla a segunda división B. Aunque finalmente, tras una histórica manifestación del sevillismo, la LFP amplió la competición a 22 clubes y anuló el descenso de Sevilla y Celta.
Un documento histórico del día que se supo que el Sevilla, finalmente, no descendería y en el que Jiménez, es sacado a hombros por la afición sevillista en los aledaños del Pizjuán:
Finalmente, la temporada 1995/1996, resulta ser un desastre, los fichajes no funcionaron y los técnicos se fueron sucediendo uno tras otro. Primero el portugués Toni, luego Juan Carlos Álvarez y finalmente Víctor Espárrago. El Sevilla logró salvarse en la última jornada y quedó eliminado en los cuartos de final de la Copa de la Uefa, a manos del Barcelona. Jiménez participó en 32 encuentros de liga, más 5 encuentros de Uefa.
El capitán sevillista en su última campaña |
Vídeo del descenso en Oviedo:
Jiménez se sintió impotente toda la temporada, viendo desde el banquillo, como el Sevilla se acercaba sin remedio al descenso, sin poder hacer nada por su equipo del alma. Julián Rubio, fue el técnico que certificó el descenso del Sevilla y en el que se confió para que ascendiera al club en la próxima temporada. Jiménez, con 33 años, terminaba contrato y Rubio no contaba con él, así que tuvo que dejar el Sevilla muy a su pesar y con gran tristeza de una forma que él nunca hubiese querido. El capitán se despidió de la afición en un Sevilla-Espanyol, aquella temporada del descenso, recibiendo la ovación de un Sánchez Pizjuán repleto.
Manolo Jiménez ponía fin a una larga etapa en el Sevilla, tras catorce temporadas, convirtiéndose en el jugador que más partidos ha disputado en primera división como sevillista, con 354 encuentros, récord, que aún hoy conserva. El lateral izquierdo se quedó huérfano durante años, ningún futbolista ofreció el rendimiento tan regular y constante de Jiménez hasta que llegó David Castedo en el año 2000. Posteriormente, pasaron grandísimos jugadores como Dragutinovic, Fernando Navarro y los canteranos Antonio Puerta y Alberto Moreno.
Jiménez, en el Real Jaén |
Aquí os dejo un bonito e interesante vídeo en homenaje a Jiménez emitido en Canal Sur:
Tras sacarse el título de entrenador y adquirir experiencia ejerciendo algunos trabajos menores, Jiménez trabajó como secretario técnico del Jaén y más tarde como segundo entrenador del Villareal, de la mano de Joaquín Caparrós. Posteriormente, Roberto Alés, decide contar con él para entrenar al Sevilla Atlético en el año 2000. Tras ascender al filial a segunda B, consigue disputar la liguilla de ascenso a segunda división cuatro veces, de forma consecutiva, consiguiendo, finalmente, el ascenso en la temporada 2006/2007. Moldeó a centenares de futbolistas, algunos de ellos, ascendieron al primer equipo, otros, desarrollaron sus carreras en otros equipos. Por sus manos pasaron Antoñito, Reyes, Antonio Puerta, Sergio Ramos, Jesús Navas, Diego Capel, Javi Varas o Fazio, entre otros muchos.
Una vez iniciada la temporada en segunda con el filial, Del Nido confíó en él tras la espantada de Juande Ramos. A pesar de que fue un entrenador discutido en ciertos sectores de la afición sevillista (los logros anteriores fueron una losa), el Sevilla acabó quinto, en una temporada que resultó ser muy complicada desde sus inicios, con la muerte de Puerta, el intento de Alves de salir del club y la posterior salida de Juande Ramos.
La siguiente campaña dejó al equipo en un meritorio tercer puesto, clasificándolo para la Champions League. En su tercera y última campaña, fue despedido a diez jornadas de finalizar la liga, a pesar de encontrarse a sólo dos puntos de los puestos de Champions pero a decir verdad, el equipo llevaba una trayectoria claramente descendente. Ese despido le privó de conseguir una Copa del Rey como entrenador sevillista, ya que el equipo se clasificó para disputar la final con él en el banquillo. El mérito se lo llevó finalmente Antonio Álvarez, tras imponerse el Sevilla, en la final, frente al Atlético de Madrid. Una copa que también le pertenece parcialmente al técnico de Arahal, siendo justos. Jiménez se volvía a marchar de su Sevilla, al menos temporalmente, al que perteneció durante 26 años en sus etapas como jugador, entrenador del filial y entrenador del primer equipo.
En 2010 se hizo cargo del AEK de Atenas, posteriormente dirigió al Zaragoza en 2011, logrando una espectacular remontada y evitando el descenso. Sin embargo, la temporada siguiente no pudo evitar el descenso y finalizó su vinculación con el conjunto zaragozano. En 2013, decidió probar suerte en una liga exótica, firmando por el Al-Rayyan, de Catar. Allí permaneció hasta finales de septiembre de 2015. Actualmente se encuentra sin equipo, es de esperar que acabe regresando a algún equipo de la liga española durante esta temporada.
TE ESTOY ESCUCHANDO EN LA RADIO EN DIRECTO. ERES UN CRACK. ENHORABUENA, SIGUE ASI
ResponderEliminarMuchas gracias!!
EliminarTe escuche por la radio y me quede atónita, y ahora después de leer el articulo sobre Jimenez, me he dado cuenta que sirves para esto. Muy buen cronista y articulista futbolistico. Estoy orgullosa de que seas mi sobrino.
ResponderEliminarAdelante!! Crac!!
pásese usted cuando quiera por el blog! jejeje
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