Unai Emery quiso jugar al despiste con su alineación pero el único despistado es el técnico del Sevilla.
Decidió revolucionar el once inicial, jugando con nada más y nada menos que cuatro centrocampistas, prescindiendo de los extremos y jugando con dos delanteros. Inexplicable, pero cierto. Además dio entrada al uruguayo Cristóforo, que no jugaba de titular con el Sevilla desde la temporada 2013/2014. ¿De qué sirve jugar con dos delanteros (uno de ellos Llorente) para jugar sin bandas?