14 enero 2016

La historia que hay detrás de Unai Emery


Unai Emery es uno de los entrenadores nacionales mejor valorados en la actualidad. Mayormente conocido por su paso por el Valencia CF y por sus éxitos en el Sevilla FC, muchas personas desconocen su pasado como futbolista, sus inicios como técnico y la saga de futbolistas de la que heredó genéticamente su pasión por el fútbol.

Unai Emery Etxegoien nació en Hondarribia (Guipúzcoa) el 3 de noviembre de 1971. Desde muy joven estuvo vinculado al fútbol, la circunstancia de que existiera una saga de futbolistas en el seno de su familia contribuyó notablemente. Su padre, Juan Emery, había tenido una larga carrera como guardameta en segunda división, jugando en las filas del Alavés, Burgos, Logroñés, Real Unión, Deportivo de La Coruña, Sporting de Gijón, Recreativo de Huelva, Granada y Jaén, donde se retiró definitivamente.

Juan Emery


El padre de Unai Emery en un entrenamiento.

Si nos remontamos aún más en el tiempo, su abuelo paterno, Antonio Emery, también jugó como guardameta en las filas del Real Unión durante buena parte de las exitosas décadas para el club de los años veinte y treinta, donde ganó dos Copas del Rey e incluso llegó a jugar en aquel entonces en una novedosa primera división.

Cuentan que se desenvolvía como interior izquierda al principio pero que tras una lesión del portero titular, ocupó su lugar y después de una excelente actuación, se estableció definitivamente en la portería. Al principio de su carrera se le conocía como Emery II, pues su hermano Román (tío abuelo de Unai), jugaba como centrocampista en el mismo club. Observen el gran parecido que guarda Unai Emery con su abuelo en la ilustración de abajo...

Antonio Emery, abuelo de Unai.


Su carrera como futbolista



Unai Emery se formó en la cantera de la Real Sociedad. Solía jugar en la posición de interior izquierdo aunque podía desenvolverse como extremo e incluso como lateral izquierdo.
Era un futbolista eminentemente técnico, poseedor de una gran zurda. Sin embargo, una grave lesión frenó su progresión cuando aún jugaba en el filial. El físico no era su fuerte, ese era quizás su mayor déficit como futbolista. Esa carencia se agravó aún más con la lesión y De Pedro, un jugador más joven que él pero más completo, le acabó ganando la partida en el filial y en el primer equipo.

Aún así, logró debutar en primera división con la Real Sociedad en la temporada 1995/1996, cuando tenía 24 años. Aunque su participación en el equipo aquella campaña se limitó casi exclusivamente a salir desde el banquillo, de hecho, solo disputó 127 minutos repartidos en cinco encuentros, anotando un bonito gol que podéis ver en este vídeo:


Cromo de Unai Emery en el CD Toledo.

La siguiente temporada se marchó al CD Toledo en busca de minutos, que militaba por aquel entonces en segunda división. Allí permaneció durante cuatro temporadas a un buen nivel, bajo las órdenes de técnicos como Gregorio Manzano o Miguel Ángel Portugal, participando habitualmente.

Tras 134 partidos disputados y dos goles anotados, curiosamente, ambos en el mismo partido, puso fin a su etapa en Toledo tras el descenso del club en su última campaña y se marchó al recién ascendido Racing de Ferrol.

Unai Emery durante un encuentro con el Racing de Ferrol

En el Racing de Ferrol permaneció durante dos campañas, y aunque participó bastante, nunca llegó a ser titular indiscutible. En su segunda temporada, se destapó en su faceta goleadora, anotando siete goles. Durante su estancia en Ferrol, además, aprovechó para realizar su formación como entrenador. Al término de la segunda campaña y con 30 años decidió marcharse al CD Leganés. Allí, Tras completar una temporada en la que tuvo una participación aceptable en el equipo, se marchó al que sería su último club, el Lorca, que militaba en segunda B.
A los 32 años, Emery afrontaba el final de su carrera en una categoría inferior. En su primera temporada, el equipo realizó una gran campaña, llegando a jugar la fase de ascenso a segunda división, aunque finalmente no se conseguió el ascenso. Unai Emery participó habitualmente, sobre todo saliendo desde el banquillo y tuvo un mayor protagonismo en la fase de ascenso.

En su segunda temporada, comenzó como titular durante las primeras jornadas pero una lesión en su rodilla le impidió continuar jugando. Tras unos meses de inactividad, en diciembre, la directiva del club le propuso hacerse cargo del equipo como entrenador tras la destitución de su técnico. A pesar de que formaba parte de la plantilla como jugador, Unai Emery no se lo pensó dos veces y se retiró como jugador para comenzar así su carrera como entrenador.

Su carrera como entrenador

Unai Emery se sentó en el banquillo del Lorca.

Unai Emery se despidió de sus compañeros para pasar los días de vacaciones por navidad, siendo un integrante más de la plantilla de jugadores. Sin embargo, cuando volvió al trabajo lo hizo como entrenador. Pasó de ser un compañero más a ser el jefe de sus antiguos compañeros, pero lejos de ser un inconveniente, esa circunstancia le favoreció.

Conocía aquella plantilla a la perfección y mantenía una excelente relación con todos ellos. En un guiño a su destino, debutó como entrenador en Sevilla, concretamente en Écija, donde su equipo se impuso por tres goles a cero.

El Lorca se encontraba inmerso en la mitad de la tabla cuando Emery tomó las riendas del carro. Bajo su dirección, el equipo realizó una gran segunda vuelta y logró clasificarse para jugar la fase de ascenso a segunda división, donde finalmente y tras una remontada con prórroga incluída, consiguió el ascenso, curiosamente, en el estadio del Real Unión, el equipo donde jugaron su abuelo, su tío abuelo y su padre. Con solo 33 años, ya había cosechado su primer gran logro como técnico.

Unai Emery celebrando el ascenso.

Tras aquel gran éxito, el Lorca afrontaba una difícil campaña como recién ascendido en la categoría de plata, con uno de los presupuestos más bajos de la categoría. Sin embargo, Unai Emery supo exprimir todo el jugo a su plantilla. Partiendo desde la solidez defensiva, el equipo ofreció un gran rendimiento, llegando incluso a coquetear con los puestos de ascenso y consiguiendo firmar un meritorio quinto puesto al finalizar la temporada.

Su gran labor y la juventud que atesoraba no pasó desapercibida para el resto de los clubes, despertando el interés de numerosos equipos. Finalmente, Unai Emery, se hizo cargo de la UD Almería en la campaña 2006/2007.

Unai Emery, durante su etapa en el Almería.
Unai Emery cumplió con creces en su primera campaña en el Almería, situándolo como subcampeón de la categoría y logrando el ascenso matemático a falta de cuatro jornadas

El Almería volvía así a primera división, 27 años después. En el club no existía duda alguna en que Unai Emery sería el próximo entrenador en la máxima categoría. En apenas tres años, había pasado de jugar en segunda B a ser entrenador en primera, habiendo logrado, además, dos ascensos de categoría. Aunque solo llegó a disputar cinco encuentros en primera división y tuvo una discreta carrera como futbolista, el técnico vasco se había convertido por méritos propios en uno de los entrenadores nacionales con mayor proyección.

En el regreso a la élite, el Almería firmó una excelente campaña, practicando un fútbol efectivo, encajando muy pocos goles y explotando al máximo las jugadas a balón parado

Consiguió la permanencia sin pasar apuros y el equipo no ocupó los puestos de descenso en ningún momento de la temporada, finalizando en el octavo lugar. Las victorias cosechadas ante el Real Madrid como local (2-0) o a domicilio frente al Depor (0-3), Sevilla (1-4) y Valencia (0-1), se recuerdan especialmente en Almería. 

Curiosamente, ganó ambos enfrentamientos contra el Sevilla, 1-0 como local, y 1-4 en Nervión con un espectacular Álvaro Negredo. La gran temporada del equipo almeriense le abrió las puertas del Valencia, uno de los grandes del fútbol español, su carrera como entrenador daba otro gran salto cualitativo.

Unai Emery, duranre

Unai Emery se hizo cargo del Valencia en la temporada 2008/2009. Llegó al club en una situación institucional algo complicada, pues el equipo había finalizado la temporada anterior en el décimo lugar e incluso estuvo cerca del descenso, además de que el club no atrevesaba su mejor momento económico.

Su meteórica carrera como entrenador adquirió un ritmo más pausado durante su etapa en el Valencia, donde permaneció durante cuatro temporadas, finalizando en el sexto lugar el primer año y siendo tercero en las tres siguiente campañas. A pesar de ello, nunca terminó de cuajar en el club valencianista.

La delicada situación económica provocaba la debilitación del equipo con las ventas de sus mejores futbolistas. Aún así, Unai Emery mostró un Valencia regular, ganador de "la otra liga", al margen del FC Barcelona y el Real Madrid. La relación con la afición valencionista se fue deteriorando con el tiempo, llegando a ser muy cuestionado por un amplio sector de la grada. Los aficionados valencianistas más críticos le acusaban de ser un entrenador poco ambicioso, que no lograba conseguir buenos resultados frente a los equipos grandes y que no sabía manejar las eliminatorias.

Finalmente, puso fin a su etapa como valencianista tras finalizar la temporada 2011/2012. Antes de finalizar su última campaña como valencianista, salió a la luz que Unai Emery emigraría al fútbol ruso para entrenar al Spartak de Moscú durante la próxima temporada.




Valeri Karpin, director deportivo del Spartak, quien coincidió con Unai Emery en la Real Sociedad, fue pieza clave para que el técnico nacido en Hondarribia desembarcara en el conjunto ruso.
Se trataba de su primera experiencia fuera de nuestras fronteras. El Spartak, un club con un pasado glorioso pero carente de grandes futbolistas en ese momento, no terminó de arrancar y Emery fue destituido pocos meses después, debido, en gran medida, a una serie de derrotas abultadas. El Spartak ocupaba el sexto puesto cuando fue destituido.


Unai Emery, en su presentación con el Sevilla.

Unai Emery estuvo sin equipo durante poco más de un mes. El Sevilla, que había destituido a Míchel a principios de 2013 por la mala situación del equipo, confió en él para intentar reparar la marcha del equipo.

A pesar de que la dinámica negativa en la que estaba inmerso el Sevilla continuó con él al mando, el equipo finalizó noveno pero logró clasificarse para la Europa League por las sanciones impuestas al Málaga y Rayo Vallecano.

Las siguientes dos campañas resultaron ser un gran éxito, dos triunfos en la Europa League y dos quintos puestos, el último, batiendo el récord de puntos conseguidos por el Sevilla en una campaña. Además de sus logros, Unai Emery se ha convertido en el técnico que más partidos ha dirigido al Sevilla en Europa. Más maduro y con una mayor experiencia, ha conseguido pulir los defectos mostrados en su etapa en el Valencia. Además, sus éxitos en el Sevilla han despertado el interés de grandes equipos, uno de ellos, el Milán, se ha interesado por el técnico vasco en más de una ocasión.

Ahora cumple su cuarta temporada al frente del Sevilla y aunque el inicio de la temporada no ha sido el que todos esperaban, todo el mundo sabe que esto no es como se comienza si no como se termina, lo que determina el éxito o el fracaso de un club. Hoy, 14 de enero de 2015, cumple tres años en el banquillo del Sevilla FC, afrontando el reto de mejorar la situación del equipo en la liga y soñando con su tercera Europa League consecutiva y con la Copa del Rey, competición con la que tiene cuentas pendientes desde que se sentó en el banquillo sevillista.

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