El Sevilla superó con autoridad al Mirandés por tres goles a cero en Anduva y obtuvo el pase a las semifinales de la Copa del Rey. El conjunto sevillista podría enfrentarse en la próxima ronda a Celta, Barcelona o Valencia.
Las claves del partido:
- El Sevilla salió muy concentrado, mentalizado de no conceder absolutamente nada a su rival y con la intención de manejar el peso del partido e imponer su calidad.
- El tempranero gol de Iborra allanó el camino muy pronto.
- Konoplyanka recuperó su nivel habitual y fue incordio para la defensa del Mirandés.
- Todos los jugadores sevillistas que estuvieron en el terreno de juego sumaron a la causa, incluso los que entraron desde el banquillo en la segunda mitad
- Juan Muñoz marcó su primer gol con el primer equipo en competición oficial y fue de menos a más en el partido. El canterano puede llegar a convertirse en una excelente alternativa en ataque.
El once inicial del Sevilla fue el esperado, quizás lo que más llamara la atención fue la presencia de los dos defensas centrales considerados titulares y también la del canterano Juan Muñoz en el ataque sevillista.
El Mirandés comenzó el encuentro tal como se presumía, con intensidad y la línea de presión muy arriba, con la intención de ponerle las cosas difíciles al Sevilla. Sin embargo, el conjunto sevillista supo leer el partido a la perfección y una vez que superaba esa primera línea de presión, encontraba muchos espacios. Un par de conducciones de N´Zonzi y Konoplyanka dejaban entrever que el Sevilla llegaría con relativa facilidad al área rival. Apenas se habían cumplido los primeros ocho minutos cuando tras una llegada sevillista al área del Mirandés el balón le cayó a Cristóforo, y cuando éste se dispuso a disparar apareció Vélez por detrás, metiendo la pierna y derribando al uruguayo.
El colegiado, muy cerca de la jugada, no dudó en señalar el punto de penalti, que se encargó de transformarlo Iborra, engañando al guardameta y haciendo el cero a uno.
Iborra marcó desde el punto de penalti. |
El gol del Sevilla eliminaba así cualquier posibilidad de sorpresa. El conjunto sevillista se había adueñado de la posesión, estaba realizando un partido serio en defensa, sin conceder oportunidades y además estaba siendo muy incisivo por las bandas.
En el 13´, Escudero puso un buen centro desde la izquierda al segundo palo buscando a Konoplyanka y el ucraniano enganchó un remate de volea que acabó marchándose ligeramente por encima del larguero. El buen juego del Sevilla había desactivado por completo al Mirandés, que solo pudo llegar a la portería defendida por David Soria a través de una falta lejana botada por Abdon a los 19 minutos que el guardameta sevillista atrapó sin excesivos problemas.
El segundo tanto parecía cuestión de tiempo. Konoplyanka lo intentó desde la frontal en el 21´ pero su disparo salió desviado. Apenas un minuto después, Vitolo encaró hacia dentro y se sacó un fuerte golpeo con la pierna izquierda que Fernández desvió como pudo.
El conjunto sevillista llegaba con facilidad y finalizaba todas sus jugadas de ataques, eliminando así cualquier posibilidad de contragolpes por parte del rival. El centro del campo sevillista funcionaba a la perfección, Sergio Escudero y Konoplyanka se asociaban bien, creando mucho peligro por la banda izquierda y en el otro extremo del campo hacían lo propio Vitolo y Coke. Así, la primera parte llegó a su fin sin que David Soria apenas tuviera que intervenir.
El segundo periodo comenzó con un guión calcado al de la primera mitad. Carlos Terrazas realizó un triple cambio en la reanudación con la intención de revolucionar el partido, pero el Sevilla, dueño de la posesión, apagaba cualquier atisbo de peligro por parte del Mirandés.
Con la situación totalmente controlada, Unai Emery decidió sustituir a N´Zonzi, amonestado, por Llorente, para eliminar cualquier opción de otorgarle ventaja al rival. El partido tomó un ritmo más pausado, encontrándose justo en el punto donde lo quería el Sevilla, que a los 63 minutos dispuso de una gran ocasión tras un fallo en la entrega de la zaga rival que llegó a Vitolo y éste, en una jugada individual, acabó picando el balón por encima del portero pero no encontró la portería por centímetros.
Llorente también tuvo su oportunidad en el 68´, pero perdonó ante Fernández hasta en dos ocasiones consecutivas. Un minuto después, Unai Emery decidió hacer su segundo cambio, retirando del campo a Konoplyanka, muy activo y peligroso, por Kakuta. En la siguiente jugada después de la sustitución llegaría el segundo tanto de la noche, obra de Juan Muñoz tras un gran pase de Vitolo desde la izquierda. El canterano sevillista definió bien con un disparo raso en el interior del área pequeña, demostrando un gran olfato de gol, estando en el sitio idóneo en el momento justo.
Juan Muñoz se dispone a celebrar su gol. |
A pesar de que la eliminatoria estaba ya más que cerrada, el juego del Sevilla continuó siendo alegre. A diez minutos de finalizar el encuentro, Unai Emery agotó su última sustitución, retirando del terreno de juego a Carriço para que Kolo ocupara su lugar.
El Mirandés tiró de orgullo y consiguió llegar a la portería de David Soria en un par de ocasiones pero el guardameta sevillista se mostró muy seguro. A punto de finalizar el choque, Coke puso la guinda a un partido perfecto, marcando el tercer tanto de la noche con un cabezazo digno de Llorente tras un magistral centro de Kakuta desde la banda derecha. El madrileño cruzó la pelota con su remate e hizo un bonito tanto ante el que nada pudo hacer el guardameta local.
El Sevilla cuajó un partido perfecto, sin fisuras. Atajó cualquier posibilidad de sorpresa mostrándose muy concentrado y metido en el partido desde el primer segundo del encuentro. El conjunto sevillista está realizando una magnífica Copa del Rey y ya solo se encuentra a un paso de una nueva final. Nada menos que 16 goles a favor y 0 en contra es su actual bagaje en la competición. El viernes tendrá lugar el próximo sorteo, que contará con las bolas del Sevilla, Celta, Valencia y Barcelona.
Los goles del partido:
fuente fotos:www.sevillafc.es
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