El Sevilla FC se impuso con autoridad por tres goles a cero al Basilea en Nervión y obtuvo así el pase a los cuartos de final de la Europa League. Por tanto, el conjunto sevillista estará en el próximo sorteo junto a Athletic, Villareal, Liverpool, Braga, Sparta de Praga, Shakhtar y Dortmund.
Las claves del partido:
- Reyes no decepcionó y se echó el equipo a las espaldas. El utrerano cuajó un partido muy sólido y asistió en los dos primeros goles.
- Gameiro volvió a realizar otro gran partido. El delantero francés atraviesa un magnífico estado de forma y con sus dos goles le desmostró a Didier Deschamps que se equivoca al no convocarle con Francia.
- Con el 1-0 en el marcador, David Soria evitó el tanto del empate con una fantástica intervención repleta de reflejos. El joven guardameta se mostró muy seguro durante los noventa minutos.
- La clara ventaja con la que el Sevilla se marchó al descanso descartó cualquier opción de sorpresa, por lo que el conjunto sevillista no necesitó realizar un desgaste excesivo en la segunda parte.
El Sevilla presentó la siguiente alineación: David Soria, Mariano, Rami, Kolo, Tremoulinas, Cristóforo, Iborra, Banega, Krohn-Dehli, Reyes y Gameiro.
El conjunto sevillista comenzó el encuentro con la intención de llevar el peso del juego y ejerciendo una línea de presión muy arriba. Lógicamente, el plan del Basilea era bien distinto; permanecer replegados esperando al Sevilla en su propio campo y mantener su portería a cero con la esperanza de conseguir algún gol a lo largo de los noventa minutos.
El Sevilla se hizo pronto con el control del juego y la alta presión obtuvo sus frutos a los cinco minutos, cuando Reyes recuperó en campo contrario y envió el balón a la frontal del área para que Krohn-Dehli asistiera a Gameiro y el delantero francés, algo escorado, disparara con su pierna izquierda desde el interior del área para que Vaclík despejara el esférico con su pie derecho.
El dominio del conjunto sevillista se acrecentaba con el paso de los minutos, mientras que el Basilea se empeñaba en cerrar todos los espacios. El Sevilla, guiado por Banega y Reyes, conseguía llegar con asiduidad al área rival, donde Iborra ejercía como delantero y Gameiro se mostraba muy dinámico, aunque sin conseguir finalizar, por lo que el equipo comenzó a buscar otras vías de ataque.
Los disparos de media distancia se convirtieron en una buena alternativa, como demostró Krohn-Dehli en el 26´ cuando enganchó un rechace tras una falta botada por Reyes y el esférico se marchó rozando el poste. Apenas dos minutos después, Banega ajustó su puntería con un disparo que se marchó desviado y nuevamente, en el 32´, repitió con un potente disparo muy lejano que a punto estuvo de sorprender al guardameta del Basilea, que envió el balón a saque de esquina con una buena intervención.
A pesar de que el dominio del Sevilla era absoluto, daba la sensación de que le iba a costar lo suyo hincarle el diente a los suizos. Sin embargo, gracias a un recurso muy utilizado este año por el Sevilla, las jugadas de estrategia a balón parado, el conjunto sevillista terminaría poniéndose por delante en el marcador. A los 35 minutos, Reyes efectuó un saque de esquina poniendo el balón al corazón del área, donde Rami, casi a la altura del suelo, cabeceó cruzado y el balón acabó alojándose en las redes tras tocar en el poste.
El conjunto nervionense ya había hecho lo más difícil, adelantarse en el marcador, aunque el resultado no invitaba a relajarse ni mucho menos. De hecho, el Basilea reaccionó casi de forma inmediata y el susto de la noche llegó tras un saque de esquina que terminó rematando Janko y que David Soria despejó, haciendo la gran parada de la noche y evitando el tanto del empate.
El Sevilla, avisado, tenía que convertir un segundo tanto para tener mayor seguridad en la eliminatoria y así fue. Al filo del descanso, Reyes realizó una magnífica jugada entrando por el costado derecho, marchándose de varios rivales y casi sobre la línea de fondo, puso el pase atrás, al que no llegó Iborra por centímetros pero si Gameiro, quien solo tuvo que empujar el balón al fondo de la red para hacer el segundo tanto de la noche.
Cuando parecía que la primera parte finalizaría con el dos a cero en el marcador, Krohn-Dehli robó el esférico en campo contrario y se adentró en el área desde el costado izquierdo para poner un preciso centro hacia Gameiro que el francés cabeceó al larguero en primera instancia y posteriormente, desde el suelo, volvió a rematar con el pie derecho para que el balón terminase entrando tras golpear nuevamente en el travesaño. El conjunto sevillista, en apenas diez minutos, había conseguido sentenciar la eliminatoria con tres goles y se marchaba al túnel de vestuario con la satisfacción del trabajo bien hecho.
En la reanudación, el Sevilla saltó al terreno de juego con los mismos hombres y la segunda parte comenzó con el mismo dominio por parte del conjunto nervionense, que manejaba el balón sin prisas. Apenas habían transcurridos cuatro minutos cuando Mariano tuvo ocasión de hacer el cuarto tanto tras una buena jugada de ataque, pero el disparo del brasileño desde el interior del área fue repelido por Vaclík. Poco después, las alarmas saltaron en el banquillo sevillista cuando Krohn-Dehli tuvo que ser sustituído por Sergio Escudero al sufrir molestias.
El Basilea, muy tocado por el resultado, apenas logró inquietar a David Soria durante toda la segunda parte. El partido estaba totalmente controlado por el Sevilla y Reyes continuaba haciendo de las suyas. Así, Unai Emery, quizás con la mente puesta en el próximo partido de liga frente al Real Madrid, quiso probar a Krychowiak, que entró en el terreno de juego sustituyendo a Iborra, provocando la ovación de la grada. Posteriormente, el técnico sevillista agotó su último cambio y cuando apenas faltaban veinte minutos sustituyó a Gameiro por Llorente.
El partido fue bajando progresivamente en intensidad, algo totalmente lógico teniendo en cuenta el calendario que tiene por delante el Sevilla. El conjunto sevillista tocaba y tocaba, mientras que el espectáculo se trasladaba a las gradas, donde la afición se lo pasaba en grande en otra gloriosa noche europea. En los minutos finales, Llorente dispuso de una gran ocasión para unirse a la fiesta, se plantó solo ante Vaclík pero su disparo fue demasiado centrado y el guardameta visitante evitó el tanto.
David Soria sufrió algunas molestias musculares en su gemelo y terminó el partido tocado. Aún así, evitó el tanto de la honra para los suizos, realizando una buena parada tras un mano a mano con Embolo, que terminó sacando sobre la línea Sergio Escudero, quien también tuvo una ocasión en el último suspiro del partido al culminar un contragolpe con un disparo desde la frontal que el guardameta visitante despejó con una gran intervención.
Con el tres a cero definitivo, el Sevilla selló su pase a los cuartos de final de la Europa League y conocerá su rival hoy mismo. La próxima cita del conjunto dirigido por Unai Emery será el próximo domingo en el Santiago Bernabeú, donde el conjunto sevillista deberá buscar puntuar para intentar acercarse aún más a la cuarta plaza.
fuente fotos:www.sevillafc.es
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